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Nulidad de Avales

Conoce las posibles soluciones que existen para conseguir la nulidad de avales personales por abogados expertos en derecho bancario y financiero.
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¿Cómo puedo reclamar mi aval?

Los avales son medios de garantía que ofrece el Código Civil para asegurar una obligación; estos medios de garantía son muy frecuentes en el ámbito bancario. Tras fallar el obligado principal a la obligación muchos avalistas se preguntan ¿Se puede quitar el aval de una hipoteca?  La respuesta es si, y el trámite es mediante procedimiento judicial en el cual el juez decidirá si el aval se colocó respetando todos los derechos.

En el caso que el banco le haya impuesto como avalista o fiador en un préstamo y quiera reclamar la nulidad de su aval debe saber lo siguiente:

  1. Los bancos, actuando con clara posición dominante, hacen renunciar al consumidor a los beneficios que la ley le otorga como avalista (orden, división y excusión). La renuncia a esos derechos permite que el banco pueda reclamar la deuda directamente al avalista, sin tener que reclamar ni siquiera al deudor primero, lo que sitúa al avalista en la misma posición que al deudor.
  2. La renuncia de los derechos, dicha renuncia es ilegal conforme a la Directiva Europea -Directiva 93/13, sobre derecho de los consumidores- que protege a los consumidores y declara nulas todas aquellas cláusulas impuestas que causen desequilibrio económico entre las partes.
  3. Si quiere reclamar su aval y anular su posición del préstamo debe interponer una demanda judicial y solicitar dicha nulidad con efectos retroactivos. En Navas & Cusí hemos obtenido sentencias decretando la nulidad de avales y afianzamientos.

¿Qué es un aval bancario y como sé si soy avalista?

Los préstamos hipotecarios suelen incorporar lo que se denomina “garantía hipotecaria”.

Las garantías del préstamo suelen ser los inmuebles que se adquieren con el préstamo hipotecario. No obstante, las entidades no suelen tener nunca suficiente, y para garantizar su posición, solicitan al deudor principal que intervenga no solamente con esta garantía sino también con todo su patrimonio; es decir, la responsabilidad ilimitada que fija el artículo 1911 del Código Civil español. Junto al deudor principal también se solicita la garantía adicional de otras personas en posición de fiadores o avalistas, haciendo que estos renuncien a sus derechos básicos del Código Civil.

Ello significa que no solamente, en caso de impago, nos pueden llegar a quitar la vivienda donde residimos, sino también puede afectar al resto de patrimonio que tiene el deudor principal: otras propiedades, coche, nómina, etc.

Los titulares de los préstamos, en un 99% de los casos, suele ser avalista personal de su propia deuda. No obstante, para saber si soy avalista de mi préstamo hipotecario, simplemente debo analizar la escritura de préstamo hipotecario, en donde se incluye si el titular es deudor “sin perjuicio de la garantía hipotecaria” del préstamo.

Pues bien, en determinados casos, esta cláusula de aval o afianzamiento del deudor principal puede declararse abusiva, si ha existido una sobregarantía del préstamo hipotecario o se ha impuesto una garantía vulnerando los derechos impuestos por el código civil español y las directivas europeas.

Garantía o aval personal

Como se ha indicado, en los préstamos también se añade lo que se denomina “garantía o aval personal”. Es decir, que en el eventual caso de que se dejara de abonar el préstamo hipotecario, la entidad financiera podría ejecutar el préstamo, quedarse con la vivienda (“adjudicarse la garantía”) y además reclamarse – en el peor de los casos- deuda pendiente al deudor, persiguiendo al deudor, de por vida, por la deuda de una vivienda que ya no tiene.

Lo anterior, dadas unas circunstancias en concreto, daría lugar a apreciar la abusividad de la nulidad de aval por existir una sobre garantía en el préstamo, condenando de por vida a la exclusión social al deudor hipotecario, que será perseguido por una deuda que, a todas luce, resulta abusiva y desproporcionada.

¿Qué posibles soluciones existen para conseguir la nulidad de avales personales?

La solución para conseguir la nulidad del aval es presentar un procedimiento judicial de nulidad de la cláusula de aval o sobregarantía.
El procedimiento en sede judicial más o menos tarda 8-11 meses, y si se obtiene finalmente una sentencia favorable, la consecuencia es la nulidad de la garantía personal del titular del préstamo o de los avalistas/fiadores, quedando éstos liberados del aval de por vida.

Existen ya sentencias en las que se declara que, si la entidad financiera ha actuado con abuso de derecho, mala fe y con abuso de su posición dominante, se puede decretar la nulidad.

El efecto de una sentencia favorable es la nulidad del aval, por tanto el deudor personal y los avalistas/fiadores dejan de responder con sus bienes presentes y futuros ante la deuda.

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