“Mapfre hará lo que tenga que hacer para defender los intereses de la empresa”. Así manifestaba el presidente de la Mapfre – Antonio Huertas- su intención de llevar a Bankia ante los tribunales para reclamar su inversión en la fallida salida a Bolsa de la entidad. Aunque ha tenido poco que ver, lo cierto es que esta decisión coincide con las conclusiones manifestadas y hechas públicas en los informes emitidos por los peritos y que afirmaban que las cuentas de Bankia habían sido maquilladas.
El que tan solo hace unos meses se convertía en el distribuidor exclusivo de seguros en Bankia presentó órdenes de compra por 281 millones de euros en la salida que tuvo Bankia en Bolsa.
Si bien es cierto que muchas instituciones o empresas no se atreven a demandar a la entidad Bankia por las inversiones que se hicieron en su día, la cosa cambiaría mucho si finalmente un juez confirma que las cuentas fueron maquilladas justo cuando salieron a Bolsa en Julio de 2011.
Las acciones de Bankia presumían en el IBEX 35 esta segunda semana de Febrero una tendencia positiva con valores alcanzados de 1.24 euros. No obstante, sigue pesando sobre la evolución en la cotización de Bankia en la Bolsa la incertidumbre sobre las posibles indemnizaciones. Las estimaciones de Bankia en relación a posibles indemnizaciones relacionadas con el caso reflejan un importe estimado de más de 600 millones de euros, de los cuales Bankia asumiría 228 millones y el resto el FROB.
El pasado 30 de enero Bankia comunicó el aplazamiento de la publicación de resultados del año 2014, previstos inicialmente para el segundo día del mes de febrero, y a la espera de la decisión del FROB sobre las compensaciones a accionistas para la salida a Bolsa en 2011.
PERO estas posibles indemnizaciones no contemplan reclamaciones por parte de inversores institucionales. Ya si Mapfre decidiera finalmente llevar a la entidad ante la justicia nacional estas estimaciones deberían recalcularse y se situarían a unos 880 millones de euros.
Mapfre no ha sido la única entidad que ha admitido que reclamará a Bankia su inversión, sino que ya otras entidades han manifestado esta voluntad, pues de no hacerlo, podrían tener un conflicto con sus accionistas por no tratar de recuperar la inversión perdida.
Cabe concluir pues, que las reclamaciones que pueda conocer los juzgados españoles no vera solamente en pequeños inversionistas etiquetados de minoristas sin experiencia en el sector financiero, sino que cabe perfectamente la reclamación de la inversión a Bankia por parte de cualquier institución o empresa que quiera defender sus derechos, de hecho la mayoría de las acciones que emprende nuestro despacho con éxito contra entidades financieras (en este caso es Bankia) corresponde a instituciones y empresas, requiriendo de un conocimiento y argumentación muy técnico para la defensa.
Navas & Cusí Abogados.
