Las sociedades familiares son aquellas en que la propiedad y/o la dirección de la empresa se encuentran en manos de una familia que desea que la compañía continúe en un futuro en manos de sus descendientes. La importancia de la empresa familiar en España es indiscutible ya que representa cerca del 90% del tejido empresarial y genera casi el 70% del empleo total.
¿Qué requisitos debe cumplir una compañía para ser considerada empresa familiar a efectos fiscales?
Los requisitos a cumplir para que una sociedad sea calificada como “empresa familiar” y poder disfrutar de los beneficios fiscales previstos en la normativa son los siguientes:
- Actividad económica: que la sociedad no tenga por actividad principal la gestión de un patrimonio mobiliario o inmobiliario, esto es, que realice una actividad económica y que tenga, al menos, el 50% de su activo y pasivo afecto a esta actividad. En el caso de arrendamiento de inmuebles, se entenderá que existe actividad económica, únicamente, cuando para su ordenación se utilice, al menos, una persona empleada con contrato laboral y a jornada completa.
- Participación mínima: que la participación del socio en el capital de la entidad sea, al menos, del 5% individualmente o del 20% junto con su cónyuge, ascendientes, descendientes o colaterales de segundo grado.
- Funciones de dirección: que alguno de los miembros del grupo familiar, en caso de que las participaciones se tengan entre el grupo familiar, ejerza funciones de dirección en la sociedad y obtenga por ellas la mayoría de sus rendimientos del trabajo y de actividades económicas.
Tributación y beneficios fiscales de las empresas familiares.
La tenencia de participaciones o acciones en compañías tributa en el Impuesto sobre el Patrimonio y su transmisión puede tributar en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas del donante. El Impuesto sobre el Patrimonio y el de Sucesiones y Donaciones cobran especial importancia en aquellos territorios donde se tributa por dichos conceptos, como puede ser el caso de Aragón, Asturias o Cataluña.
No obstante, incluso en dichas Comunidades, el cumplimiento de los requisitos para ser considerada empresa familiar permite aplicar a las participaciones o acciones de la sociedad los siguientes beneficios fiscales:
- Exención en el Impuesto sobre el Patrimonio.
- En caso de herencia, reducción del 95% en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones de los donatarios.
- En caso de donación de las participaciones o acciones a las futuras generaciones, reducción del 95% en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y exención en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas de la ganancia patrimonial del donante siempre que se cumplan los siguientes requisitos adicionales: que el donante tenga 65 o más años, o se encuentre en situación de incapacidad permanente, en grado de absoluta o gran invalidez, si tiene menos de 65 años; que el donante deje de realizar funciones de dirección en la compañía o grupo familiar, sin estar obligado a transmitir la totalidad de sus participaciones o acciones en la compañía; que el donante tuviera derecho a aplicarse la exención de empresa familiar en el Impuesto sobre el Patrimonio; que los herederos mantengan lo recibido durante un plazo de 10 ó 5 años, dependiendo de la Comunidad Autónoma.
Es importante destacar que se excluye de la aplicación de los beneficios fiscales indicados a aquellos bienes y derechos contabilizados en el activo de la empresa familiar que no sean necesarios para el ejercicio de la actividad empresarial, de manera que los beneficios fiscales previstos pueden no resultar aplicables al 100% de la participaciones o acciones.
Importancia de la planificación fiscal en la empresa familiar
La correcta planificación fiscal es esencial para maximizar los beneficios fiscales aplicables a la empresa familiar. Esto incluye no solo el cumplimiento de los requisitos legales y de la doctrina administrativa para obtener beneficios fiscales, sino también la planificación estratégica de la sucesión empresarial para garantizar la continuidad del negocio en manos de los descendientes de la familia.
En Navas & Cusí somos abogados expertos en derecho fiscal y tributario, especialmente en lo referente a optimización fiscal de grupos familiares, con más de 30 años de experiencia. Ofrecemos asesoramiento integral para ayudar a las empresas familiares a aprovechar al máximo las ventajas fiscales disponibles facilitando una transición fiscalmente eficiente entre generaciones.
