La sucesión de una empresa familiar es un proceso que puede definir el futuro de la familia, y también de la compañía. Tras años de experiencia, recogemos aquí algunas de las dudas y desafíos más comunes que enfrentan los fundadores o propietarios al considerar la transición de su negocio a la siguiente generación, especialmente cuando existen hijos involucrados en la compañía en diferentes grados de compromiso y capacidad.
Desafíos comunes en la sucesión de empresas familiares
– Como se reparten los beneficios de la sociedad si hay hijos que trabajan, especialmente a diferentes ritmos: Cuando hay varios hijos trabajando en la empresa, suele surgir la preocupación sobre cómo repartir equitativamente las participaciones, y también sus ingresos. Esta situación se complica cuando uno de los hijos se destaca como la “locomotora” del negocio, mientras que otros tienen un rol menos protagónico. Está claro que un sistema de “café para todos” no sirve, puesto que generará una sensación de falta de reconocimiento hacia el empuje más. Para ello se pueden establecer modelos de retribución flexible en forma de salario, o unas participaciones con dividendo preferible.
– Deseo de retiro parcial del fundador: Muchos propietarios desean jubilarse y transferir las acciones a sus hijos, pero sin desvincularse completamente de la toma de decisiones. En ocasiones esta decisión es debida a los requisitos fiscales que establece la legislación fiscal para las donaciones en determinadas comunidades autónomas. Para ello, se ha de diseñar un sistema en el que el propietario done las participaciones y no tenga que renunciar completamente al control de la compañía pero si a la función ejecutiva.
En nuestra experiencia asesorando en la sucesión de empresas familiares, hemos implementado mecanismos efectivos para abordar los desafíos. De hecho, uno de nuestros objetivos en la sucesión familiar es velar por la armonía familiar.
1. Donación de participaciones con usufructo:
El propietario dona participaciones a sus hijos, pero estos se obligan a darle un usufructo para que mantenga los derechos de voto y económicos. Esto significa que los hijos se convierten en propietarios legales de las acciones, pero el fundador mantiene el control sobre las decisiones importantes y los beneficios económicos; esto es una solución muy positiva cuando la fiscalidad es un elemento relevante.
El usufructo permite una transición ordenada y gradual del control de la empresa, asegurando que el fundador pueda seguir tomando decisiones mientras los hijos se adaptan a sus nuevas responsabilidades.
2. Creación de nuevas acciones especiales
Si lo que se quiere es donar y evitar el usufructo, se puede crear una serie especial de acciones que otorga al fundador la mayoría de los derechos de voto. Estas acciones especiales pueden tener derechos de voto superior a una acción igual a un voto.
Con ello, el fundador mantiene un control significativo sobre la empresa sin la necesidad poseer el resto de acciones. Fiscalmente tiene beneficios ya que se pueden valorar a menor coste.
3. Acciones especiales para el miembro trabajador que empuja la compañía:
En ocasiones, por razón de expertise o capacidad de entrega se desea que un hijo en particular tome la mayoría de las decisiones, para este caso se pueden emitir acciones específicas que le otorguen un mayor derecho de voto. Por ejemplo, estas acciones podrían permitirle tomar decisiones operativas diarias mientras que las decisiones estratégicas y de gran impacto requieren la aprobación de la junta al completo. Con estas acciones específicas, también se puede conseguir una retribución especial para el miembro que más trabaje, dando acciones con beneficio preferente.
Cada caso de sucesión de empresa familiar es diferente, pero lo importante es tener herramientas suficientes para conseguir acomodar al máximo las posiciones de cada miembro familiar dentro del espíritu integrador de las decisiones del fundador.
Nuestra experiencia en estas operaciones ayudan a asegurar una transición con la definición necesaria, analizando la operación de una forma holística, valorando todos los componentes (humanos, mercantiles, fiscales, etc.)
Si necesitas asesoramiento en la sucesión de tu empresa familiar, en Navas&Cusí contamos con amplia experiencia en el área. Contacta con un abogado societario para asegurar una transición exitosa y armoniosa.