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Las stock options son una forma de remunerar a los empleados de una compañía. Dicha manera de remuneración consiste en conceder a los trabajadores derechos para comprar un número de acciones de la propia compañía a un precio prefijado y por un periodo de tiempo determinado para ejercitar la compra. A lo largo de este periodo determinado o al final del mismo, el empleado puede adquirir las acciones al precio de ejercicio, lo que decidirá hacer en caso de que el valor de la acción es superior al precio de ejercicio.

Se trata de un complemento retributivo, adicional al salario fijo, a favor de trabajadores que busca alinear los intereses de los socios con los de sus empleados ya que, cuanto más suba el precio de la acción, mayor será la remuneración de ambos (ya sea por la venta de acciones o vía reparto de dividendos). El objetivo buscado es motivar y retener en la compañía empleados clave y perfiles tecnológicos, difíciles de encontrar.

Desde la perspectiva societaria, las stock options vienen a convertirse en un mecanismo especial para la incorporación de empleados como socios o accionistas.

Tributación stock options.

De acuerdo con la Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, las stock options tienen distintas fases de tributación:

  • Cuando se concede la opción de compra a favor del empleado: esta fase no tiene trascendencia tributaria ya que depende del trabajador ejercitar o no el derecho de opción.
  • Cuando el empleado decide comprar la acción/participación: en este caso se tributa en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, como rendimiento del trabajo en especie, por la diferencia positiva entre el precio de mercado de la acción y el precio al que se fijó cuando se concedió el derecho a la opción.
  • Cuando el trabajador, siendo ya accionista, decide vender las acciones/participaciones a un tercero: tributará, como ganancia patrimonial, por la diferencia positiva entre el valor de venta y el valor de adquisición + el rendimiento en especie ya tributado anteriormente.

Existe una exención del IRPF de los primeros 12.000 euros. Para aplicar dicha exención, se han de cumplir los siguientes requisitos:

  • Que se ofrezcan las stock options a todas las personas trabajadoras de la empresa, bajo las mismas condiciones.
  • Que ningún trabajador, conjuntamente con su cónyuge o sus familiares hasta el segundo grado, supere el 5% del capital social de la empresa.
  • Las acciones se tienen que mantener durante tres años desde el momento en que se ejerza la opción, esto es, desde su compra.

Adicionalmente, si entre el momento de la concesión de la opción de compra de las acciones y el momento en que el trabajador decide ejercerlas (comprarlas) transcurren más de dos años, se puede aplicar una reducción del 30% en la declaración. Esta reducción se aplica a la parte no exenta (la que queda fuera de los 12.000 euros).

Nueva Ley de Startups

La Ley 28/2022, de 21 de diciembre, denominada como Ley de Startups, introduce cambios significativos en el tratamiento fiscal de las stock options con el objetivo de hacerlas más atractivas tanto para empleados como para las empresas. Los principales cambios son:

  • Aumento del límite de exención fiscal: se incrementa el límite exento de 12.000 euros a 50.000 euros anuales.
  • Diferimiento de la tributación del rendimiento del trabajo en especie generado en el ejercicio de la opción. El pago de impuestos por las stock options se diferirá hasta que ocurra el primero de los siguientes sucesos:
    • Venta de las acciones: cuando el empleado venda las acciones, en lugar de cuando se ejercen las opciones. Esto permite a los empleados pagar impuestos solo cuando realmente obtienen un beneficio económico al vender las acciones.
    • Cotización en Bolsa: si la empresa sale a Bolsa el empleado deberá tributar por las stock options en ese momento.
    • Máximo de 10 años desde la entrega de las acciones: si no se han producido los eventos anteriores, el empleado deberá tributar a los 10 años desde el momento de la entrega de las acciones.
  • Ampliación del concepto de empresa beneficiaria: estas ventajas fiscales se aplican no solo a startups de reciente creación, sino también a aquellas que cumplan con una serie de requisitos como tener menos de 5 años de existencia, un volumen de negocio anual no superior a 10 millones de euros, no distribuir dividendos, tener la sede social en España y tener, al menos, al 60% de la plantilla con un contrato laboral en España.

Las stock options tuvieron un gran auge en la década de los noventa pero, con el pinchazo de la burbuja digital de principios de siglo, esta forma de remuneración cayó en desuso. Sin embargo, el nuevo escenario que se ha abierto con la Ley de Startup ha hecho que muchas empresas en España retomen la fórmula de retribución a través de la concesión de stock options a los empleados como una forma para alinear a trabajadores clave con la estrategia de la compañía.

Los abogados especialistas en derecho mercantil y fiscal de NAVAS&CUSÍ cuentan con una amplia experiencia en stock options y otras formas de retribución variable lo que les permite ofrecer soluciones personalizadas a los intereses de cada cliente.

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Navas & Cusí Abogados
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